miércoles, 28 de agosto de 2013

BIOGRAFIA RESUMIDA DE CARLOS A. JUNQUET

Carlos Alberto Junquet.

Nació en una familia de trabajadores un 14 de febrero de 1945, en el barrio porteño de Liniers (Capital Federal). De joven mostró inclinación por el deporte, y se destacó en el Club Liniers en el equipo de básquet.
Su educación formal se vio interrumpida cuando cursaba el secundario en la Escuela Jorge Newbery para comenzar a trabajar. No obstante ello, su formación autodidacta y habida lectura de libros diversos, pero mayormente filosofía, política y derecho laboral, le permitió desenvolverse con soltura en diferentes ámbitos, incluso institucionales.

Fue, entre otras cosas taxista, camionero, colectivero, comerciante, incluso trabajó brevemente en pozos de petróleo en el sur, pero muchos recuerdan su paso por el sindicalismo de los años ochenta, su militancia política y sobre todo, su aporte al movimiento fomentista de Ituzaingó.

Su paso por el sindicalismo.
A principios de los años ochenta, cuando todavía el país se encontraba bajo el yugo de la dictadura militar, mostró un interés por la defensa de los derechos de sus compañeros trabajadores, y a pesar del riesgo que ello significaba, comenzó a militar en la UTA (Unión Tranviarios Automotor). Ya en democracia, fue electo delegado, y formó parte de la primer Comisión Directiva electa en democracia del sindicato, ejerciendo el cargo de pro-tesorero. Concluido el periodo del mandato y en medio de diferencias eticas e ideologicas irreconciliables con la cupula que se enquistaría los siguientes 20 años en la conducción del gremio, Carlos se alejo definitivamente.

El fomentismo.
En 1986 se mudó a Ituzaingo, lugar al que adoptaría como lugar para vivir, y amaría para siempre.
Fue de la mano de otro fomentista y tio, Osvaldo Camarotta, con quien dio sus primeros pasos en la Sociedad de Fomento San Alberto, a la que tiempo después como presidente representaría activamente en la vida institucional de las sociedades intermedias de Ituzaingó, por ejemplo en los “foros de seguridad”, entre otras.
Durante más de veinte años, Carlos Alberto Junquet fue un líder fomentista reconocido, escuchado por sus pares, y respetado por autoridades y funcionarios.

Su pasión por la política.
En la vida política se caracterizó por ser carismático, su conocimiento de las necesidades de la gente de a pie, locuacidad innata y capacidad para entender las coyunturas. Su especialidad, era el análisis político de los acontecimientos, y muchos lo convirtieron en un referente. Pero otras cualidades fueron su inmensa generosidad, y absoluta falta de ambición personal, razón por la cual nunca pretendió a cargos ni puestos.

Un hombre de familia
En lo personal, Carlos fue un padre comprensivo y cariñoso, un abuelo adorable, amado compañero y esposo, un compinche de su hermana -aun a la distancia-.  Le gustaban las reuniones familiares, sentarse en la cabecera de la mesa, usar siempre su cuchillo, llevar a Lucy el desayuno a la cama, la picada...

Para sus amigos siempre tuvo tiempo, ya sea para escuchar o acompañar, café de por medio. Disfrutaba y promovia las tertulias en los bares.

La madrugada del 6 de mayo de 2013, repentinamente y para sorpresa de todos, luego de la habitual cena familiar, Carlos fallece, dejando un vacío mayúsculo en toda la familia y amigos cercanos, que cuesta llenar, a pesar de los hermosos y adorables recuerdos que nos dejó.

Eduardo.-
(N del R: Viejo, todos te vamos a extrañar, Gracias por TODO.)